La “economía del conocimiento” llegó para quedarse

Con la aprobación del “Régimen de Promoción de la Economía del Conocimiento” que regirá en todo el territorio de la República Argentina y que tiene como objetivo promocionar actividades económicas que apliquen el uso del conocimiento y la digitalización de la información apoyado en los avances de la ciencia y de las tecnologías, a la obtención de bienes, prestación de servicios y/o mejoras de procesos, el Estado ha puesto nuevamente su foco en uno de los principales sectores de la economía que muestra un crecimiento sobresaliente en los últimos años.

El total de exportaciones anualizadas del denominado sector de los Servicios Basados en el Conocimiento (SBC) llegó a los USD 6.257 millones durante el primer trimestre de 2019, manteniendo la participación en el total de bienes y servicios exportados por encima del 8,0% por tercer año consecutivo con saldo superavitario para el sector (+ USD 660 millones).

El empleo asalariado registrado en empresas del sector privado implicó la creación 3.819 puestos de trabajo y le permitió a los SBC alcanzar los 439.000 asalariados (42% freelancers), llevando su participación sobre el empleo total de la economía a su valor máximo en los últimos 8 años (6,7%).

Durante 2017 fueron alrededor de 1 millón los estudiantes vinculados al sector, concentrados geográficamente en CABA ( principalmente ciencias económicas y de la administración) y en La Plata (principalmente arquitectura y diseño). Las ingenierías representan un 12,4% del total país.

Durante marzo de 2019, el salario promedio anual en SBC se ubicó en torno a los USD 15 mil, siendo el subsector del software y servicios informáticos (SSI) el principal impulsor de crecimiento con salarios promedio de USD 20,3 mil anuales brutos.

La creciente integración entre bienes y servicios abre la puerta a una serie de acciones focalizadas en fomentar la interrelación entre diversas actividades de bienes y servicios. La digitalización, la creación de clusters y redes de conocimiento, las políticas de desarrollo de proveedores y el apoyo a las estrategias de servitización de los sectores manufactureros son algunas áreas relevantes para el desarrollo del sector, que definitivamente ha llegado para quedarse.